Texto del día 02 de Noviembre


Un hogar para el desnudo

Es tarde, está lloviendo, amigos míos. Regresemos a casa.
Alejémonos de estas pobres ruinas, igual que una bandada de lechuzas las hemos embrujado.
Aunque el ciego nos llama, regresemos a casa.

Los motivos que arguyen
los sensatos, los tristes, los tediosos no pueden inundar de sombra el corazón: este amor espectral no nos aflige, y los imaginarios paraísos no pueden sujetarnos.

Algunos ven el grano, pero no la cosecha.
No preguntéis más cuándo ni más cómo.
Que pazcan los rebaños.
En la casa dancemos, festejemos que Shams el de Tabriz ha construido un hogar para el puro y el desnudo.