Los más cercanos a Dios
no son la gente de las palabras,
sino la gente del silencio;
porque los corazones no se elevan con la voz, sino con la sinceridad.
No busques un milagro,
busca un momento de verdad;
pues la sinceridad con Dios
crea en el corazón lo que las montañas no pueden crear.
— Yalal ad-Din Rumi